top of page

Nunca es tarde para dejar los miedos y ser feliz!

Hola! Soy Anna Oscanoa!

Recuerdo desde pequeña sentir una gran admiración por los bailarines, por la destreza y seguridad que proyectaban. Sin embargo, siempre lo sentí como una realidad lejana a mí. Era una persona tímida e introvertida, a quien le costaba mucho expresar sus sentimientos. Imaginarme como bailarina y vivir de eso, no me lo creía. Estuve relacionada con el baile durante el colegio y la universidad, pero esa inseguridad dentro mío me obligo a no luchar por una pasión que vivía escondida dentro mío, yo sabía que mientras bailaba era feliz y era la única forma de expresar todo lo que sentía …. Pero no me la creía. Así que me concentre en mi carrera y me aleje del baile.

Pasaron los años y dentro de mi carrera iba de acuerdo con lo planificado; sin embargo, me sentía vacía por dentro, algo me faltaba. Yo sabía muy bien que era: el baile. Así que decidí hacer a un lado a esa voz dentro mío que me decía: “Qué vas a lograr si regresas ahora” …. Y decidí volver a bailar.

Primero, busqué clases de Jazz o Ballet … luego esa inseguridad dentro mío me bloqueó de nuevo por la técnica que se requiere dentro de estos géneros. Luchando contra esos miedos, encontré un curso nuevo Latin Jazz y fue ahí que conocí a una persona súper especial: Mia! …. Me encantaba la pasión y disciplina que nos trasmitía. Admiraba como siendo más joven que yo, sí pudo entender que esta era su pasión y lucho por ella. Yo quería ser como ella; a pesar de que no me gustaba como me veía en el espejo mientras bailaba, luche mucho para continuar y no alejarme. Muchas veces nosotros somos nuestros peores enemigos.

Tuvimos nuestro primer show, recuerdo la felicidad que sentí dentro mío. Sentí que podía expresar todo lo que tenía dentro. En ese momento no pensé si lo hacía bien o no. Solo quería bailar y así lo hice. Hasta que tuve que decidir de nuevo porque mis tiempos se estaban limitando era: mi vida personal (trabajo, pareja, estudios) o baile. Mi falta de confianza me obligaba ver al baile como algo alejado o solo un pasatiempo. Seguía sin creer que yo podía hacer una carrera. Me aleje de nuevo.

En mi mente pensé solo serán unos meses. No fue así, estuve 6 años alejada del baile. Cada año que pasaba, mis sueños se alejaban y el vacío dentro mío crecía. A fines del 2017, muchos problemas dentro de mi vida personal y laboral se juntaron. Me diagnosticaron el síndrome del quemado o Burnout, había escuchado sobre eso pero que me este sucediendo a mi me parecía una broma. Sin embargo, era algo que estaba afectando mi vida por completo, me sentía perdida y sin motivación. Por mi cabeza pasaba la idea volver al baile, pero habían pasado tantos años que pensaba que era tonto retomar un sueño de una Anna de 15 años ahora que estaba a puerta de los 30 años. Así que dije: Madura Anna! debes superar esto de otra forma. Encontré una terapia de Psicología del arte, en esta me hicieron entender que las personas tenemos distintas formas de expresarnos y el baile era el mío. El problema no es que sea tímida o introvertida, esa es mi esencia. El problema es que no lograba liberar mis sentimientos de forma adecuada.

La felicidad es una decisión, decidí que no podía estar quejándome o haciéndome la victima todo el tiempo. Así que tuve que ser fuerte, luchar con mis miedos, inseguridades, prejuicios por mi edad y volví a bailar en Febrero del 2018. Seguía a Ladies latinas y Mia todo el tiempo, y decidí probar con una clase libre. Entre al salón con mil miedos, me sentía sola hasta que Mia me saludo por mi nombre. Habían pasado mil años desde que nos vimos la última vez, pero ella me hizo sentir acompañada. Ese gesto me dio mucha fuerza para continuar en el baile.

Ya son más de 15 meses que sigo en el baile y no pienso dejarlo. El proceso que he vivido en todo este tiempo ha sido muy hermoso. He conocido personas admirables, ya sea en Ladies Latinas como D1, siento que son parte de mi familia.

Aún mantengo mi esencia, esa persona introvertida y reservada. Pero he logrado conectarme conmigo misma, entender que el baile no es un pasatiempo para mi, es una pasión y el medio por donde expreso mis sentimientos. A nivel técnico me queda muchísimo por aprender, sin embargo, no me siento abrumada. Creo que algo que me ha dado el baile, es aprender que la constancia y reconocimiento de los pequeños pasos lo es todo.

Quería aprovechar este espacio para contarles el proceso que tuve para volver al baile y aceptar que es parte de mi vida. Nunca es tarde para dejar los miedos y ser feliz. Nosotros podemos ser nuestros peores enemigos si no conectamos con nuestro interior. Esa fuerza y decisión por querer ser feliz es lo que nos ayudará a conseguir muchos momentos gratificantes. Mi proceso por conocerme y aceptarme aún continúa, pero estoy segura de estar en el camino correcto. En estos meses he visto como mi vida ha dado un giro de 360°, logré que esa voz interna que siempre me juzgaba cambie y sea la voz que me insiste en ser disciplinada para conseguir mis sueños. Logré verme en el espejo y gustarme, sentirme sexy y demostrar cuánto me amo. Logré dejar de sentir miedo a mi soledad y realice mi primer viaje sola para hacer algo que me gusta al igual que el baile, la fotografía. Logré entender que los problemas son solo pequeños pasos que tenemos para volvernos más fuertes.

Muchas gracias por su tiempo!


join us

 for the 

PARTY

Recipe Exchange @ 9pm!

Tags
Sígueme
  • Facebook Basic Black
  • Twitter Basic Black
  • Google+ Basic Black
bottom of page