top of page

Vivir

Desde chiquita fui una apasionada por el arte y mi mamá con lo poco que tuvo siempre me apoyó. ¿y por qué no probar con clases de ballet?

Aún recuerdo mis primeras clases y la emoción que tenía. Desde el primer día sentía una pasión y una sed de superación, sabía que quería bailar. No sabía por cuanto tiempo ni hasta cuando, y cuando miraba a las “bailarinas mayores” en escenario sabía que quería hacerlo por un buen tiempo.

A mis 10 años de edad, por cosas de la vida me tuve que mudar de país ¡y no fue fácil! Adaptarse al nuevo ritmo, aprender otro idioma y sobre todo hacer nuevas amistades. Para un mejor proceso de adaptación mi mamá buscó clases de ballet a las cuales asistía solamente una vez por semana, pues es lo que ella podía pagar y es lo que a mí me hacía sentir como en casa. Cada miércoles lo esperaba con ansias. Y es justo en este momento donde sucede…se te pega el bichito y de repente quieres ser bailarina profesional, pues ya tienes más noción de lo que se trata. Te empiezas a empapar de baile y más baile. Para ese entonces mi maestra me había becado, conocía la situación y veía en mí un interés por aprender. Pase de ir una hora semanal a ir 3 horas por día y nunca me era suficiente.

Luego llega esta hermosa etapa “la adolescencia” y en mi vida surgieron tantos cambios, en los cuales deje el baile por completo. Había perdido mi motivación, simplemente deje de ser “yo” … ¡Que etapa tan larga! Me duró aproximadamente 4 años hasta volver a vivir, volver a respirar, volver a sentir. Me di cuenta que no me había tomado el tiempo de pensar cuanto extrañaba el bailar hasta este preciso instante…

¿Qué cómo volví a bailar? … ¿Alguna vez te ha pasado que te cuestionas algo y de repente sientes que “el mas allá” te responde? ¿Crees que es casualidad?

Era mi primer año en la universidad y de repente los vi bailar, estaban bailando bachata… ¡waooaaa que lindo! - ¿Pero que es bachata? ¡YO QUIERO! Empecé a investigar sobre aquello y como anillo al dedo un día una compañera de universidad expone sobre la salsa y la bachata. -Espera! ¿Que? ¿Me hablan a mí? Ni más ni menos me dirijo a la oficina de cultura. “Quiero anotarme en el ballet de la universidad”. Llegado el día me siento tan fuera de onda y más dura. - Ok. Recuerdo que antes tenía más flexibilidad... no importa, trabajaré más para poder estar al nivel. QUIERO BAILAR. Uff cuanto extrañaba bailar!! Mientras escribo estas líneas me doy cuenta que volví a reencontrarme conmigo misma. Volví a vivir, volví a sentir.

Meses después esta compañera me invita a su escuela de baile de salsa y bachata. Sin dudarlo caí en el lugar, estaba nerviosa recuerdo y sinceramente no sé por qué… Había escuchado de ello, pero no sabía que la salsa y la bachata se la podía bailar así. - Mmmm parece que tengo dos pies izquierdos, no logro coordinar este básico de salsa… pero que bien se siente. Me gusta esta música. Es así que fueron pasando los años y nuevamente nace la sed de bailar en mí y superarme, y es que es una sensación que va más allá de solo bailar. ¡Es lo que sientes y lo que transmites cuando lo haces! Es lo que eres.

Definitivamente quería aprender y saber más de ello. Empecé a tomar más clases con distintos maestros, empecé a viajar. Entre mis viajes visité Lima y fue donde escuché por primera vez de un grupo de mujeres que bailan una maravilla… las Ladies Latinas. En ese instante mi cabeza piensa en ¿cómo lo hacen? ¿Cómo hacen para bailar así? Realmente sentía mucha admiración, pero aun no me sentía lista para lanzarme en el mundo de “Lady”. Pasado un buen tiempo de este “encuentro” y durante mucho tiempo me enfoque en mejorar mi baile y no podía encontrar algo que hiciera “click” conmigo. Me sentía atascada. Sabía que necesitaba más pero no sabía de qué.

Llega esta hermosa pandemia y para completarla nos tiene encerrados. El uso de las redes aumenta y mi Instagram explotaba de talento... Durante este tiempo no solo me di cuenta de que algunas veces perdí tiempo conmigo cuando tenía la oportunidad, sino que también lo estaba desperdiciando justo ahora. ¿Qué estaba haciendo yo para cumplir con mis objetivos? ¿Qué estaba haciendo yo para mejorar como persona? Y es aquí donde caes en el Instagram de Mia y empiezas a ver no solo la calidad de baile que tiene sino la calidad de persona que es y mejor aún… ella tiene un espacio en donde comparte parte baile, experiencias y transmite conocimientos. Lo más lindo es ver que no está sola, sino que tiene un gran equipo de trabajo.

Ahora estoy aquí, tomando clases virtuales y aunque me encuentre en otro país no se imaginan lo cerca que las siento.

Más que feliz de formar parte de las alumnas latinas. Para mí, Ladies Studio es un espacio integral donde no solo buscan sacar lo mejor de ti como bailarina sino también como persona… y eso... no te lo brinda cualquiera.

¡Espero verlas pronto!

Agradezco a mi mamá y a mi hermana por apoyarme siempre. Y a mí por no rendirme.


join us

 for the 

PARTY

Recipe Exchange @ 9pm!

Tags
Sígueme
  • Facebook Basic Black
  • Twitter Basic Black
  • Google+ Basic Black
bottom of page